Algunas dudas que nos pueden surgir sobre la práctica del Tai Chi Chuan
¿Qué es el Tai Chi?
El Tai Chi (realmente Tai Chi Chuan) es un arte marcial chino de los denominados internos. Cuya existencia cuenta con algunos centenares de años. Son varios los estilos de Tai Chi Chuan (en adelante TCC) existentes: Chen, Wu, Yang ..., siendo el más divulgado y conocido el estilo Yang, y dentro de cada uno de ellos podemos encontrar diferentes escuelas.
Se trata de un arte marcial que además es muy beneficioso para la salud tanto física como mental (como demuestran numerosos estudios orientales y occidentales), basado en la filosofía toaísta y en la medicina china, es otra manera diferente de entender la defensa personal en comparación con otras artes marciales externas. Así encontramos continuas referencias a la suavidad en los clásicos, a la no utilización de la fuerza (muscular), a la no-acción: "cien gramos para vencer a quinientos kilos", "ser como el agua"...
Tai Chi Chuan y Chi Kung
Aunque tendemos a mezclarlas, debemos de tener en cuenta que son dos disciplinas diferentes, que comparten puntos en común, pero diferentes. Como se ha dicho anteriormente el TCC es un arte marcial y el Chi Kung es una disciplina destinada específicamente a la mejora de la salud, estando basadas ambas disciplinas en la Medicina Tradicional China comparten cosas en común, incluso hay algún tipo de Chi Kung que denominan marcial.
Dependiendo de las escuelas de Tai Chi Chuan, unas han hecho más uso que otras de las técnicas de Chi Kung para acondicionamiento del cuerpo. Muchos maestros defendían que el TCC es Chi Kung mientras que el Chi Kung no es TCC, lo que viene a decir que quien practica el arte marcial además hace Chi Kung sin tener que recurrir a los ejercicios específicos de esta disciplina, y por ese motivo no hacían uso de ellas ni las enseñaban. En la actualidad lo normal es encontrar que se den ambas disciplinas en las clases, unos dan mayor importancia a unas u otras, según la tendencia de la escuela. Pero hemos de tener claro que si lo que queremos es aprender TCC este debe de ser nuestro trabajo preferente, independientemente de que podamos hacer practica de Chi Kung para completar ciertos aspectos del TCC.
¿Tai Chi para la salud o marcial?
Es una eterna discusión entre los practicantes de Tai Chi, algunos creen que al aprenderlo con su parte marcial lo convierte en algo violento, cuando ellos han decidido hacer este tipo de disciplina precisamente para relajarse y en contra de la violencia, para su crecimiento personal, desde mi punto de vista es una manera de ver el Tai Chi Chuan desde un desconocimiento absoluto. Otros defienden que el Tai Chi es un arte marcial y cualquier cosa que se aparte de eso no es válido para nada, tal vez otro punto de vista que pueda resultar extremista (o no) entendible desde un punto de vista de aquel artista marcial que ha dedicado mucho tiempo a obtener su conocimiento del mismo y su destreza, que ha profundizado mucho en este arte marcial y que considera que lo están desvirtuando y amputando.
Desde este contexto yo os voy a dar mi punto de vista. El TCC nació como arte marcial y como tal hay que comprenderlo y practicarlo, ¿Quiere eso decir que si no me interesa aprender un arte marcial no debería practicar TCC? Cada persona decide hasta donde quiere llegar, este arte marcial es muy beneficioso para la salud (tanto física como mentalmente) y por lo tanto su practica es muy recomendable. Ahora bien, hay que practicarlo teniendo en cuenta su esencia, para tener una estructura y ejecución adecuada, otra cosa puede que incluso resulte perjudicial para la salud. Al quitar su esencia marcial a los movimientos nos encontramos con coreografías exentas de sentido que van desvirtuándose cada vez más y que como decía anteriormente pueden ser perjudiciales para la salud, por eso es necesario aprenderlo con una base sólida que le dio su origen marcial.
La tendencia actual es a obviar la parte marcial del TCC y por tanto gran parte del trabajo que eso conlleva que es tan beneficioso para nosotros, lo que lo ha ido convirtiendo es formas más orientadas a hacer Chi Kung que a aprender TCC, pero que al final pierde los beneficios de estas dos disciplinas. El Chi Kung está totalmente definido y tiene sus propias formas o técnicas, al igual que ocurre con el Tai Chi.
¿Tai Chi imitado o con comprensión?
Mientras mucha gente se plantea la cuestión anterior son pocas las que se plantean si el TCC debe de ser una burda imitación de los movimientos de nuestros maestros o por el contrario su ejecución debe de estar llena de comprensión del por qué y para qué de las diferentes técnicas o movimientos que ejecutamos.
Es inevitable al principio de nuestra práctica dedicarnos a imitar una y otra vez los movimientos de nuestro de maestro, sobre todo porque no tenemos una comprensión del mismo, pero lamentablemente esto continúa así durante años (para aquellos que no se han aburrido y lo han dejado antes, incluso nada más empezar). Son muchos los profesores que dan su clase y en el que las explicaciones sobran, eso en una mentalidad occidental como la nuestra tiene poco sentido. Debemos comprender y sentir por qué son las cosas así, imitar por imitar no sirve para nada. Llegar a desarrollar una estructura corporal adecuada depende en gran medida de nuestra comprensión de los principios básicos del TCC, y de su comprobación una y otra vez, tanto con trabajo individual como en parejas.
¿Qué es eso del empuje de manos o tui shou como lo llaman algunos?
El empuje de manos o tui shou es una parte fundamental del TCC, sin ella nuestro Tai Chi se quedaría en una mera coreografía y no podrías acceder a la verdadera esencia de este arte marcial, impidiéndonos acceder a todos sus beneficios. El empuje de manos nos da lo comprensión de las diferentes energías que se usan en el TCC, se convertirá en nuestro banco de pruebas donde comprobar que estamos lo suficientemente relajados (no flácidos), que nuestra estructura es la adecuada para llevar la fuerza del contrario al suelo y devolver nuestra energía al compañero, aprender energías que sin este trabajo sería imposible como es la escucha de la fuerza que nuestro compañero nos aplica, su dirección, su velocidad, su fuerza, etc., otras como ceder, adherirnos y así podríamos seguir mucho más.
Comprender la suavidad en el TCC sin este trabajo simplemente es imposible, pero además se trata de un trabajo divertido y ameno. Mucha gente que sólo ha practicado las formas del Tai Chi aún creyéndose que las ejecuta con mucha relajación cuando llega el momento de ponerse con un compañero se tensan ¿Por qué? Muchos pueden ser los motivos, de ellos adquieren un gran protagonismo los que se dan a nivel mental, resulta que ahora estoy probando lo que se supone he estado haciendo durante mucho tiempo pero como resultado obtengo que soy incapaz de relajarme de ceder ante el empuje que me produce mi compañero, soy incapaz de adaptarme a él, mis deseos de ganar o de hacerlo bien están produciendo en mi una tensión que poco a poco se generaliza a todo mi cuerpo. Pero también comprobamos que esa relajación que creía tener en todas las articulaciones de mi cuerpo al ejecutar la forma no eran tales, una simple tensión en el tobillo que creía no tener hace que ofrezca resistencia al empuje de mi compañero y como resultado todo mi cuerpo se tensa y me convierto en un palo para que mi compañero me mueva a placer, soy incapaz de absorber la energía de mi compañero de adaptarme a la situación sólo ofrezco resistencia, tensión. Por eso es mucho más difícil relajarse ante una tensión que cuando estamos practicando la forma solos, pero en la vida real estamos sometidos a tensiones y aprender a ceder y adaptarse es muy importante, a eso nos ayuda también el empuje de manos, resultando mucho más beneficioso este tipo de trabajo para evitar el estrés, la ansiedad, etc. que la práctica individual.
Aunque la mayoría en los inicios de nuestra práctica del empuje de manos tendemos a tensarnos, también encontramos gente que es capaz de permanecer relajada (son muchísimos menos) pero sin una estructura adecuada y demasiado flácido, donde no se aprecia un uso adecuado de las energías, llegados a un punto donde pierden su centro de gravedad inevitablemente tensarán al sentir que pierden el equilibrio.
Así es como el empuje de manos (tui shou) se convierte en nuestro banco de pruebas como mencionaba anteriormente, además de que vuelvo a insistir es muy divertido. Aunque más que un banco de pruebas es verdaderamente una escuela, donde uno tiene que aprender a vencer nuestras ansias de ganar para llegar a tener un verdadero aprendizaje, invertir en pérdidas como decía el profesor Cheng Man Ching. Hay que aprender a ganar respetando los principios del TCC, de otra manera nos alejaremos del verdadero camino, y para eso es necesario perder muchas veces (lo que le duele bastante a nuestro ego pero nos ayuda a evolucionar como personas).
¿Qué edad es ideal para comenzar a practicar TCC?
Cuanto antes se empiece mucho mejor. Asociamos el TCC a las personas mayores y somos muchos los que nos acercamos a este arte marcial con edad avanzada, sobre todo en occidente, muchas veces cuando empieza a vencernos el estrés o la ansiedad y buscamos un ejercicio suave y que parece relajarnos. Este concepto priva muchas veces a la gente joven a su práctica, cuando sería ideal también para ellos. Decía un maestro que lo ideal es comenzar de jóvenes para llegar a la vejez en un estado de salud y movilidad que lo convertirán en la envidia del resto de las personas mayores.
Pero el Tai Chi Chuan por su forma de práctica y su posible adaptación lo convierten en ideal para iniciarse a cualquier edad, nuestro compromiso y perseverancia será lo que nos ofrezca mayores o menores beneficios de la práctica del mismo.
¿Qué estilo de TCC debería elegir?
Cualquier estilo de Tai Chi Chuan enseñado por un buen maestro que tenga unos profundos conocimientos del mismo es ideal. El más difundido es el estilo Yang, que en principio puede parecer más fácil de ejecutar que el Chen, por ejemplo. Pero la realidad es que profundizar en cualquiera de ellos lleva mucho dedicación, nos puede parecer más bello uno que otro, o llamarnos más la atención pero no creo que este deba de convertirse en lo primordial para elegir que estilo practicar. Si encuentras o sabes de un buen maestro que pueda enseñarte, sin lugar a dudas esa será la mejor elección del estilo que quieras practicar, aprender el que él te puede enseñar.
¿Es tan beneficioso el TCC para la salud como dicen?
Son numerosos los estudios que se han hecho al respecto, unos me imagino que más serios e imparciales que otros, pero sí podemos concluir con toda seguridad en que el TCC es muy beneficioso para la salud, tanto mental como física. Son muchos los beneficios que se han descrito sobre la práctica del mismo que no voy a enunciar aquí, ya que son diversos los artículos que podemos encontrar. Si quiero hacer mención que además de los beneficiosos para la salud sin lugar a dudas aprenderemos a conocer y a escuchar mejor a nuestro cuerpo, ganaremos en equilibro, en coordinación motora, relajación, etc. que ya son suficientes motivos para su práctica sobre todo cuando nos vamos acercando a edades avanzadas, está demostrado que una adecuada práctica evita caídas en nuestra vejez. Como siempre los beneficios estarán ligados a nuestra dedicación y perseverancia en la práctica.
Es una eterna discusión entre los practicantes de Tai Chi, algunos creen que al aprenderlo con su parte marcial lo convierte en algo violento, cuando ellos han decidido hacer este tipo de disciplina precisamente para relajarse y en contra de la violencia, para su crecimiento personal, desde mi punto de vista es una manera de ver el Tai Chi Chuan desde un desconocimiento absoluto. Otros defienden que el Tai Chi es un arte marcial y cualquier cosa que se aparte de eso no es válido para nada, tal vez otro punto de vista que pueda resultar extremista (o no) entendible desde un punto de vista de aquel artista marcial que ha dedicado mucho tiempo a obtener su conocimiento del mismo y su destreza, que ha profundizado mucho en este arte marcial y que considera que lo están desvirtuando y amputando.
Desde este contexto yo os voy a dar mi punto de vista. El TCC nació como arte marcial y como tal hay que comprenderlo y practicarlo, ¿Quiere eso decir que si no me interesa aprender un arte marcial no debería practicar TCC? Cada persona decide hasta donde quiere llegar, este arte marcial es muy beneficioso para la salud (tanto física como mentalmente) y por lo tanto su practica es muy recomendable. Ahora bien, hay que practicarlo teniendo en cuenta su esencia, para tener una estructura y ejecución adecuada, otra cosa puede que incluso resulte perjudicial para la salud. Al quitar su esencia marcial a los movimientos nos encontramos con coreografías exentas de sentido que van desvirtuándose cada vez más y que como decía anteriormente pueden ser perjudiciales para la salud, por eso es necesario aprenderlo con una base sólida que le dio su origen marcial.
La tendencia actual es a obviar la parte marcial del TCC y por tanto gran parte del trabajo que eso conlleva que es tan beneficioso para nosotros, lo que lo ha ido convirtiendo es formas más orientadas a hacer Chi Kung que a aprender TCC, pero que al final pierde los beneficios de estas dos disciplinas. El Chi Kung está totalmente definido y tiene sus propias formas o técnicas, al igual que ocurre con el Tai Chi.
¿Tai Chi imitado o con comprensión?
Mientras mucha gente se plantea la cuestión anterior son pocas las que se plantean si el TCC debe de ser una burda imitación de los movimientos de nuestros maestros o por el contrario su ejecución debe de estar llena de comprensión del por qué y para qué de las diferentes técnicas o movimientos que ejecutamos.
Es inevitable al principio de nuestra práctica dedicarnos a imitar una y otra vez los movimientos de nuestro de maestro, sobre todo porque no tenemos una comprensión del mismo, pero lamentablemente esto continúa así durante años (para aquellos que no se han aburrido y lo han dejado antes, incluso nada más empezar). Son muchos los profesores que dan su clase y en el que las explicaciones sobran, eso en una mentalidad occidental como la nuestra tiene poco sentido. Debemos comprender y sentir por qué son las cosas así, imitar por imitar no sirve para nada. Llegar a desarrollar una estructura corporal adecuada depende en gran medida de nuestra comprensión de los principios básicos del TCC, y de su comprobación una y otra vez, tanto con trabajo individual como en parejas.
¿Qué es eso del empuje de manos o tui shou como lo llaman algunos?
El empuje de manos o tui shou es una parte fundamental del TCC, sin ella nuestro Tai Chi se quedaría en una mera coreografía y no podrías acceder a la verdadera esencia de este arte marcial, impidiéndonos acceder a todos sus beneficios. El empuje de manos nos da lo comprensión de las diferentes energías que se usan en el TCC, se convertirá en nuestro banco de pruebas donde comprobar que estamos lo suficientemente relajados (no flácidos), que nuestra estructura es la adecuada para llevar la fuerza del contrario al suelo y devolver nuestra energía al compañero, aprender energías que sin este trabajo sería imposible como es la escucha de la fuerza que nuestro compañero nos aplica, su dirección, su velocidad, su fuerza, etc., otras como ceder, adherirnos y así podríamos seguir mucho más.
Comprender la suavidad en el TCC sin este trabajo simplemente es imposible, pero además se trata de un trabajo divertido y ameno. Mucha gente que sólo ha practicado las formas del Tai Chi aún creyéndose que las ejecuta con mucha relajación cuando llega el momento de ponerse con un compañero se tensan ¿Por qué? Muchos pueden ser los motivos, de ellos adquieren un gran protagonismo los que se dan a nivel mental, resulta que ahora estoy probando lo que se supone he estado haciendo durante mucho tiempo pero como resultado obtengo que soy incapaz de relajarme de ceder ante el empuje que me produce mi compañero, soy incapaz de adaptarme a él, mis deseos de ganar o de hacerlo bien están produciendo en mi una tensión que poco a poco se generaliza a todo mi cuerpo. Pero también comprobamos que esa relajación que creía tener en todas las articulaciones de mi cuerpo al ejecutar la forma no eran tales, una simple tensión en el tobillo que creía no tener hace que ofrezca resistencia al empuje de mi compañero y como resultado todo mi cuerpo se tensa y me convierto en un palo para que mi compañero me mueva a placer, soy incapaz de absorber la energía de mi compañero de adaptarme a la situación sólo ofrezco resistencia, tensión. Por eso es mucho más difícil relajarse ante una tensión que cuando estamos practicando la forma solos, pero en la vida real estamos sometidos a tensiones y aprender a ceder y adaptarse es muy importante, a eso nos ayuda también el empuje de manos, resultando mucho más beneficioso este tipo de trabajo para evitar el estrés, la ansiedad, etc. que la práctica individual.
Aunque la mayoría en los inicios de nuestra práctica del empuje de manos tendemos a tensarnos, también encontramos gente que es capaz de permanecer relajada (son muchísimos menos) pero sin una estructura adecuada y demasiado flácido, donde no se aprecia un uso adecuado de las energías, llegados a un punto donde pierden su centro de gravedad inevitablemente tensarán al sentir que pierden el equilibrio.
Así es como el empuje de manos (tui shou) se convierte en nuestro banco de pruebas como mencionaba anteriormente, además de que vuelvo a insistir es muy divertido. Aunque más que un banco de pruebas es verdaderamente una escuela, donde uno tiene que aprender a vencer nuestras ansias de ganar para llegar a tener un verdadero aprendizaje, invertir en pérdidas como decía el profesor Cheng Man Ching. Hay que aprender a ganar respetando los principios del TCC, de otra manera nos alejaremos del verdadero camino, y para eso es necesario perder muchas veces (lo que le duele bastante a nuestro ego pero nos ayuda a evolucionar como personas).
¿Qué edad es ideal para comenzar a practicar TCC?
Cuanto antes se empiece mucho mejor. Asociamos el TCC a las personas mayores y somos muchos los que nos acercamos a este arte marcial con edad avanzada, sobre todo en occidente, muchas veces cuando empieza a vencernos el estrés o la ansiedad y buscamos un ejercicio suave y que parece relajarnos. Este concepto priva muchas veces a la gente joven a su práctica, cuando sería ideal también para ellos. Decía un maestro que lo ideal es comenzar de jóvenes para llegar a la vejez en un estado de salud y movilidad que lo convertirán en la envidia del resto de las personas mayores.
Pero el Tai Chi Chuan por su forma de práctica y su posible adaptación lo convierten en ideal para iniciarse a cualquier edad, nuestro compromiso y perseverancia será lo que nos ofrezca mayores o menores beneficios de la práctica del mismo.
¿Qué estilo de TCC debería elegir?
Cualquier estilo de Tai Chi Chuan enseñado por un buen maestro que tenga unos profundos conocimientos del mismo es ideal. El más difundido es el estilo Yang, que en principio puede parecer más fácil de ejecutar que el Chen, por ejemplo. Pero la realidad es que profundizar en cualquiera de ellos lleva mucho dedicación, nos puede parecer más bello uno que otro, o llamarnos más la atención pero no creo que este deba de convertirse en lo primordial para elegir que estilo practicar. Si encuentras o sabes de un buen maestro que pueda enseñarte, sin lugar a dudas esa será la mejor elección del estilo que quieras practicar, aprender el que él te puede enseñar.
¿Es tan beneficioso el TCC para la salud como dicen?
Son numerosos los estudios que se han hecho al respecto, unos me imagino que más serios e imparciales que otros, pero sí podemos concluir con toda seguridad en que el TCC es muy beneficioso para la salud, tanto mental como física. Son muchos los beneficios que se han descrito sobre la práctica del mismo que no voy a enunciar aquí, ya que son diversos los artículos que podemos encontrar. Si quiero hacer mención que además de los beneficiosos para la salud sin lugar a dudas aprenderemos a conocer y a escuchar mejor a nuestro cuerpo, ganaremos en equilibro, en coordinación motora, relajación, etc. que ya son suficientes motivos para su práctica sobre todo cuando nos vamos acercando a edades avanzadas, está demostrado que una adecuada práctica evita caídas en nuestra vejez. Como siempre los beneficios estarán ligados a nuestra dedicación y perseverancia en la práctica.